ELENA NAVARRETE La sociedad cada vez está más concienciada con el reciclaje. Los contenedores de papel, vidrio, plástico, cartón e incluso aceite ya están repartidos por toda la ciudad. Y aunque no tengan ningún contenedor propio, los cartuchos y tóneres de tinta también se recogen y reciclan para darles un nuevo uso.
La empresa granadina Anyma informática se dedica a la recuperación de cartuchos de tinta para impresoras ofreciendo una alternativa a los originales con productos reciclados de calidad y que, a su vez, son compatibles con las impresoras, faxes y fotocopiadoras que se encuentran actualmente en el mercado.
"La empresa nació en 2002 con la intención de ofrecer servicios informáticos a empresas y particulares",explica Ángel Granados, el director de Anyma. "Posteriormente decidimos hacer un cambio de objetivos y dedicarnos al reciclaje de cartuchos y tóneres para impresoras, para poder abrirnos a nuevos mercados. Lo cierto es que fue efectivo", afirma.
"El proceso de reutilización es un trabajo principalmente manual. Cada cartucho requiere un montaje exclusivo y un cuidado especial, aunque existen máquinas comunes para limpiarlos y para que queden totalmente libres de tinta o llenadores antes de recargarlos", detalla Granados.
La compra de cartuchos tratados y ya usados siempre es más barato. "Todos los artículos tienen un 30% de ahorro comparado con el original. Además se ofrece una calidad mínima igual a la del producto original", comenta Granados. "Hay diversidad de opiniones sobre estos productos reciclados. Muchas personas los aceptan y los demandan, mientras que otros los rechazan directamente. Es cuestión de concienciar a la gente", asevera. "Por lo general, la gente se muestra comprensiva cuando un artículo no les funciona. Tan sólo el 3% de los 8.000 productos que fabricamos mensualmente sale con algún pequeño defecto. Aun así los comprobamos todos para ofrecer mayor garantía", añade el director de Anyma.
La empresa se encuentra en continuo proceso de investigación, desarrollo e innovación."Siempre están saliendo al mercado impresoras nuevas con sus cartuchos y tóneres correspondientes. Es imprescindible estar al corriente de las novedades que sufre el mercado", cuenta.
La firma ha evolucionado de forma notable desde sus orígenes como empresa dedicada a la informática hasta convertirse en un centro de reciclaje. "Actualmente somos líderes en este mercado. Tenemos clientes en varias ciudades de España como Toledo, Madrid o Galicia", explicó Granados.
"Lo mejor que tiene ser empresario es poder decidir por ti mismo el camino a andar en cada momento, poder aportar ideas y crear un grupo estable de trabajadores. También es importante poder llegar a concienciar a la gente para aprendan el valor del reciclaje", argumenta.
Una de las próximas metas de Anyma es modificar su imagen corporativa y extenderse por toda la península. Lo hará, eso sí, manteniéndose firme en su filosofía de proteger y cuidar el medio ambiente y concienciar a la gente de los beneficios del reciclaje.